SAN MIGUEL: TODA ROSCA Y CERO POLÍTICA. OPOSICIÓN BUSCA REORGANIZAR LIDERAZGOS UTILIZANDO LA INTERNA DEL PJ

“Todo está como era entonces, la casa la calle, el río…”, así comienza el poema de Olegario Víctor Andrade. Y aquí en San Miguel, también «todo está como era entonces». El mismo grupo dirigencial que se unió el año pasado para repartirse los cargos en las listas locales, de concejales y consejeros escolares; el mismo grupo que se reparte cargos jugosamente rentados en provincia y nación (Franco La Porta, Juanjo Castro, Marcela Vigueras, Bruno Baschetti, Carlos “Cuqui” Coronel, Santiago Fidanza, HéCtor «Gallego» Fernández, Etc., Etc.), sin importarle los militantes, que siempre apoyan y nunca “cobran”; ese mismo grupo que pierde elección tras elección frente a Joaquín de la Torre y su Chirolita Jaime Méndez, es ese grupo que hoy se divide para enfrentarse por la hegemonía supuestamente opositora.

MUCHA ROSCA Y NADA DE POLÍTICA

No sabemos desde cuando la oposición en San Miguel es poseedora de una aberración ideológica, que la lleva a creer que la rosca es la política. No señores, la rosca bien entendida es una herramienta más, como el marketing, como las encuestas, como la organización de las fuerzas propias, como la inserción en los medios periodísticos para conseguir opinión pública favorable, y otros elementos necesarios. Pero la política es otra cosa.

Así, mal formados los jóvenes, y también militantes aún con años de trajinar en estos menesteres de la política sanmiguelina, son pura rosca de la peor, la de la pura deslealtad (condición ineludible del rosquero sanmiguelino), que los lleva a “poner los huevos en diferentes canastas”, a saltar de un lugar a otro, donde le ofrezcan algo más. ¿Programas de gestión a defender, principios ideológicos? “Minga de eso”, diría justamente el gran Minguito. Entonces vemos a algunas y algunos, insospechados de deshonestidad, «pasar del brazo con quien no deben pasar», fruto de este miserable rosquismo que suplantó a la política.

EL QUE FUE A SEVILLA PERDIÓ SU SILLA…

Así, en esta inefable realidad política, que nos acontece en San Miguel, vemos fortalecido a Juanjo Castro, actual concejal y presidente del Partido Justicialista, que busca su reelección. Y vemos en estampida derrotista al ingeniero Franco La Porta. Este es un dato de la realidad, no una opinión, porque así lo quiso La Porta cuando declinó la contienda con Castro y le cedió el protagonismo electoral, poniendo en la lista para reeleccionar a un acólito suyo en el consejo escolar, y a su sobrina y su secretaria en lista de concejales (2ª y 4ª). Con sus fuerzas diezmadas por su propia inacción durante la pandemia, La Porta descubrió que “se había ido a Sevilla” demasiado tiempo (Sevilla es eufemismo por “casa quinta de barrio El Tato”, o «chalet de seis dormitorios en Pinamar»). Así que agachó la cerviz frente al avance de Castro y, como en el tango Cafetín de Buenos Aires, “se entregó sin luchar”.

Ahora, La Porta busca volver al podio opositor, no se sabe para qué, tal vez para volver a arrugar llegado el momento, así que armó una lista en el PJ San Miguel, haciendo encabezar como víctima propiciatoria a la Dra. Tati Vuillermet, dedicada militante social y persona honesta, pero presa del rosquismo como deformación militante; como siempre él se hace el distraído, como que es su lista pero “no sabe, no contesta”, si se gana triunfa él, si se pierde, la derrota es de los otros. Hombre de misa diaria, el ingeniero no debería desconocer aquello de que “a los tibios los vomita Dios”.

Por el lado del campamento de Castro, todo parece organizado, todo es previsible, viene de dar vuelta una PASO de terror y asegurar los 5 concejales y los dos consejeros escolares, cifra que impuso en 2015 La Porta y que Castro sostuvo, además de triunfar en Santa Brígida, donde La Porta perdió en 2019, por primera vez en la historia del peronismo local;  pero los juanjistas son lo que son, con buenos y réprobos, igual que en la lista de La Porta, ya dijimos que son los mismos que se unen para la repartija, y se dividen y disputan para la repartija.

¿Y qué es la política entonces.? Ese es tema para otra extensa nota. Mientras tanto, los peronistas miren y aprendan de Mario Ishii, Luis Vivona y Leo Nardini. Ellos hacen política. En San Miguel, el único que entiende la política, y lo escribo dolorosamente, es Joaquín de la Torre, por eso es el patrón del juego.

“Y una voz como a Lázaro espera, que le diga levántate y anda”, riman líneas de un soneto de Gustavo Adolfo Bécquer. Así debería ser la voz de la política a la militancia sanmiguelina. Para que se levante y ande, para que exista una oportunidad de recuperar el distrito de San Miguel, que el peronismo perdió desde que Eduardo Duhalde se lo entregó a Aldo Rico.

PEDRO BIRRO – Peronista regional

Compruebe también

GRAVÍSIMO: AL MALTRATO ANIMAL JAIME MÉNDEZ AGREGA VIOLENCIA DE GÉNERO EN DOMADA EN SAN MIGUEL. VER VIDEO.

La mal llamada reunión de domada de caballos, que auspicia la municipalidad de San Miguel, …

DOMINGO DE SOL CON JUEGOS, GOLOSINAS Y JUGUETES COMPARTIÓ JUANJO CASTRO CON NIÑOS DE BARRIO CARABAZA

Y fue un domingo de tarde soleada, tan escasas en otoño. Y allí, en la …

Dejanos tu comentario